En la industria aeroespacial, los equipos deben cumplir rigurosas normas de calidad y rendimiento, ya que impulsan procesos críticos que pueden salvar vidas. Cuando se trata de sistemas de aire comprimido que impulsan múltiples procesos en la industria, el control de la contaminación es una prioridad máxima junto con las características habituales buscadas de eficiencia, fiabilidad y bajo mantenimiento. 

Dos tipos de compresores de aire desempeñan un papel dominante en la industria aeroespacial: los compresores de tornillo exentos de aceite y los compresores rotativos ubricados refrigerados. Se encargan de aplicaciones que van desde la separación del aire y la fabricación de motores hasta los sistemas de residuos por vacío, entre otras. Ingersoll Rand está a la vanguardia de estas tecnologías y lleva décadas suministrando dispositivos y servicios a la industria aeroespacial. 

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